He conseguido vencer mil tormentas buscando la tierra que un día dejé,
siempre esperando en el cielo la estrella que alumbre el camino que
me haga volver,
y con el viento cruzar esta mar que tanto cuesta recorrer,
y volver a respirar el aire del lugar que me vio nacer.
Perdí mi rumbo y a cambio del alma robé la grandeza que tiene este mar,
fui condenado a vagar sin destino, vació y errante sin puerto ni hogar,
es mi prisión el mundo entero sin tierra que pueda algún día volver a pisar,
Porque solo mi esperanza es la muerte, y mi castigo es la eternidad.
Voy a entregar hasta el último aliento que quede en mi vida en poder regresar,
aunque camine por siempre en tinieblas y mi única luz se apague en mi soledad,
no dejaré mi memoria un destino que haga que olvide mi puerto y mi hogar,
ni rendiré mi valor ni mi sangre, lucharé
Más allá del umbral del horizonte,
allí donde nunca me alcance la tempestad,
buscaré la tierra que el mar esconde,
porque solo mi esperanza es la muerte,
y mi castigo es la eternidad.
Si ha llegado al fin mi vida,
ruego a Dios que antes de morir,
con el último golpe de viento,
el mar me lleve junto a ti.
Más allá del umbral del horizonte,
allí donde nunca me alcance la tempestad,
buscaré la tierra que el mar esconde,
porque solo mi esperanza es la muerte,
y mi castigo es la eternidad. (x2) *