Yo no soy ningún campeón, tampoco soy magnate,
pero te invito a caminar, a disfrutar de esta tarde,
como lo hacía Salomón, como lo hacía Marley,
una simple conversación, sin intereses materiales.
Somos humanos los dos, hormonas fluyen por la sangre,
suena como un tambor, eso que en tu pecho late,
y va surgiendo calor, las palabras son más libres,
la risa cambia tu color, tus ojos quieren que los mire.
Que no participe la ilusión, de vivir a cuestas de alguien,
de entregar tu corazón, por un anillo de diamantes,
quiero escuchar tu canción, acompañarte cuando cantes,
quiero sentir tu calor, incluso sin tocarte.
No disimules mi amor, que tu deseo es evidente,
tu quieres lo mismo que yo, pero hay mucha sexura en tu mente
no disimules mi amor, que tu deseo es evidente,
tu quieres lo mismo que yo, pero hay mucha sexura en tu mente,
Nananana ne eh eh no
Riff 2: Este se toca por momentos en la canción.