Dios y el Diablo van susurrando
cosas a mi espalda
la vírgen en camisón se pasea
y del lado de la fábrica
suena un motor
Sus bicicletas húmedas
Son dos desocupados más
lo justo se hizo moda
y el verso casi un verso de verdad
y el trabajo una zona que no está
laira lai ri re eea
Aburridos jugadores con los naipes marcados
Se prohibe hablar del mundo en esas salas
Dios y el Diablo van remendando madrugadas
y no entienden nada
La vírgen como mujer
salgan para el taller