Cuando ya no me quieras, no me finjas cariño, no me tengas piedad,
compasión ni temor;
si me diste tu olvido, no te culpo ni riño, ni te doy el disgusto
de mirar mi dolor.
Partiré canturreando, mi poema más triste, le diré a todo el mundo,
lo que tú me quisiste;
y cuando nadie escuche, mis canciones ya viejas, ay! detendré mi camino
en un pueblo lejano, y ahí moriré.
Sé que ya no me quieres, me lo han dicho tus ojos, partiré por la
ruta, que no tiene final;
te amaré siempre, siempre, partiré sin enojos, y mis labios sin
besos, cantarán un madrigal.
Partiré canturreando, mi poema más triste, le diré a todo el mundo,
lo que tú me quisiste;
y cuando nadie escuche, mis canciones ya viejas, ay! detendré mi camino
en un pueblo lejano, y ahí moriré.