Cuando te vuelves mujer
al borde de mis abrazos,
de labio a labio la miel,
¡cuánta cantidad de labios!
Cuando te vuelves mujer
te sobran muchas sencillas
maneras de dulce niña
entre la falda y los años.
Cuando te vuelves mujer
se te desnuda la risa,
se te resbala el amor.
Y te desvisto de caricias
y te abrigo
de besos de vez en vez.
Y te devisto de ternuras
y te abrigo
para sembrarte la piel.
Que tú rompes las maderas de
las caderas que te ven partir,
tras de ti va la montaña y yo
que a galope el verbo y su color.
Que tú rompes los esquemas de
las maneras de tu amor en mi.
Cuando te vuelves mujer
al borde de mis abrazos,
te sobra tanta mujer
y eres mujer sin atajos.
Que tú rompes las maderas de