Olor a sudor, a whisky y a carmín,
son las cuatro y no se distinguir,
si te habla de algún alquiler,
ni su cara vista a contraluz.
De piel morena y nombre Caterine,
Cuenta una mirada perdida
por un amor de papel,
con distintos besos de almíbar.
Que salen de su boca,
mientras se vuelve loca,
temblando si la tocan, falsedad,
suspiros, sin control de calidad.
Provoca, rebota ante su boca,
cambia caricias por su majestad,
su móvil por un nuevo despertarse loca.
Rebota ante su boca.
3ª parte
Esconde verdades que se pueden ver,
sin un lamento, como un todo a cien,