Mburucuyá la sombra
de Eustaquio te cobija
la luna correntina
te presta su payé.
Tus hijos musiqueros
curtidos de silencio
revientan los olvidos
al son de chamamé.
II
Ya pulsan los Miqueri
sonoros instrumentos,
Antonio Niz sereno
suelta su bordonear.
Las cuerdas y los fuelles
se trenzan en el viento
el canto de la tierra
afirma el sentimiento
y allá por Manantiales
revienta un sapukay.
(Recitado)
Mburucuyá te nombra
el canto Imaguaré!