1. Su mirada triste, sus labios resecos,
temblaba de miedo, se miraba al espejo.
Le faltaba el valor, vivía en depresión
se angustiaba su corazón: No paraba de llorar.
Ella tenía una decisión, una dura relación,
ese hijo de puta que la abandonó.
Ese fruto prohibido que viajaba en sus venas,
en su vientre se quedó. Lo abrazaba con amor,
no tenía otra opción
¡Oh! Y no paraba de llorar. No, no, no. no.
* Y de pronto en el cielo, en el firmamento,
se abre y un rayo, un rayo de sol,
le pintaba su cara, le cambiaba su alma
y de rodillas cayó, de rodillas se cayó
Yo seré tu padre, yo seré tu madre.
Nada te faltará, de eso me encargo yo.
Te daré mi mano, te daré mi brazo,
¡desgarraré mi vida por ti, mi amor!
Yo seré tu padre, yo seré tu madre.
Nada te faltará, de eso me encargo yo.
¡Tengo que ser fuerte! ¡Te haré un súper hombre!
Es lo que ella gritaba al cielo sin temor.
Al cielo sin temor. Oh, huo, huo. No, no, no, no.
Sol Re mi Re (3)
2. Y ha pasado el tiempo, el niño creció,
ella lo abrazaba y un beso le dio.
Recordó aquellos años, cuando era pequeño.
!Qué duro la pasó! Una lágrima derramó
levantando su mirada. !Oh¡
Y no paraba de llorar. No, no, no, no.
* Y de pronto en el cielo, en el firmamento,
se abre y el rayo, y el rayo de sol,
le pintaba su cara, le cambiaba su alma
y de rodillas cayó, de rodillas se cayó
Yo seré tu padre, yo seré tu madre.
Nada te faltará, de eso me encargo yo.
Te daré mi mano, te daré mi brazo,
¡desgarraré mi vida por ti, mi amor!
Yo seré tu padre, yo seré tu madre.
Nada te faltará, de eso me encargo yo.
¡Tengo que ser fuerte! ¡Te haré un súper hombre!
Y el que no te quería ahora te pide perdón.
Ahora te pide perdón. ¡oh, oh! !oh, oh!
Ahora te pide perdón. ¡oh, no, no, oh!
Ahora te pide perdón