En la puerta todas tus maletas
esperando solo tu silueta
y en la calle un taxi por llegar.
Yo te observo desde la escalera
y una triste lágrima indiscreta
se me asoma al ver que te vas.
De nada nos sirvió
ese papel
que un día le firmamos
al juez.
Maldita rutina se nos vino encima
maldita rutina que hoy nos asesina
maldita la ley y la tinta
que hicieron papel nuestras vidas
a quién se le acorre hoy en día
colgarle al amor una firma.
Te despides tras la ventanilla
y tus dedos limpian tus mejillas
y mis ojos llueven sin parar.
Desapareciste de mi vida
como el agua por la alcantarilla
como el tiempo que no vuelve más.
De nada nos sirvió
ese papel
que un día le firmamos
al juez.
Maldita rutina se nos vino encima
maldita rutina que hoy nos asesina
maldita la ley y la tinta
que hicieron papel nuestras vidas
a quién se le acorre hoy en día
colgarle al amor una firma.
Maldita rutina se nos vino encima
maldita rutina que hoy nos asesina
maldita la ley y la tinta
que hicieron papel nuestras vidas
a quién se le acorre hoy en día
colgarle al amor una firma.
a quién se le ocurre hoy en día
colgarle al amor una firma.