Me escapé del mundo yéndome al norte,
pero otro mundo esperaba allá.
La hacés bien, y aunque te hierva la sangre
te encadenas para no llamar.
¿Cómo hacés? Conozco todos tus trucos,
Y me esperás, más de la cuenta
siendo siempre la que yo soñe.
Y firme yo, me encierro en que es peor,