Esa Colombina puso en sus ojeras
humo de la hoguera de su corazón
aquella marquesa de la risa loca
se pintó la boca por besar a un clown
cruza el palco hasta el coche
la serpentina nerviosa y fina
como un pintoresco broche
sobre la noche del carnaval.
Te quiero conocer, saber adónde vas
"adiós, adiós, adiós ¿quién soy, adónde voy?
yo soy la misteriosa mujercita de tu afán".
No finjas más la voz, abajo el antifaz
tus ojos por el corso van buscando mi ansiedad
descúbrete por fin, tu risa me hace mal
detrás de tus desvíos, todo el año es carnaval.