Ven oh Santo Espíritu
y envíanos tu luz.
Tú serás la claridad
que inunde el corazón.
Padre de los pobres, ven a enriquecer
te lo suplicamos, todo nuestro ser.
Tú eres quien consuela
amigo siempre fiel.
Tregua en el trabajo
brisa en el calor.
Tú eres el descanso, la ponderación.
Cuando viene el llanto, la consolación.
Eres luz hermosa
que regala amor.
No nos abandones
Espíritu de Dios.
Sana las heridas, limpia el corazón.
Dale tú el calor y oriéntalo.
Con tus siete dones
ven, repártelos.
Tu bondad, tu gracia
nos den inspiración.
Salva al que busca la salvación.
Danos alegría. Amén, aleluya
Ven oh Santo Espíritu
y envíanos tu luz.
Tú serás la claridad
que inunde el corazón.